Después de las lesiones, de las largas sesiones de terapia, Stiven Vega regresó a su mejor nivel y se ha convertido en el eje de la media cancha de Millonarios.
La paciencia, la perseverancia, la resiliencia, virtudes fundamentales en la búsqueda del éxito, tienen en el ‘Jefecito’ una muestra palpable de las recompensas que la vida le regala al que sabe esperar sin desesperar, sin desfallecer.
Sin prisa, pero sin pausa, dice el refrán; esa fue la consigna de Vega después de sufrir varias caídas. Nunca dejó de trabajar, nunca dejó de creer.
Poco a poco el Profe Gamero imprimió su sello en la progresión del volante, dándole cada vez más minutos de calidad en la cancha. Primero fue como suplente, luego como relevo principal, hoy, es de nuevo el medio centro imprescindible en medio del momento definitivo de la temporada.
No es casualidad que la crisis de Millonarios haya empezado a terminar cuando Stiven retomó el control del equipo; Vega suma tres partidos consecutivos como titular, jugando los 90 minutos, han sido tres triunfos para el ‘embajador’.
Frente a Pasto y Pereira de visita y ante Junior en El Campín, Millos enderezó un camino torcido y ahora está a un paso de meterse entre los ocho para luchar por el título.
No cabe duda que en el momento bisagra del semestre, Gamero tiene un volante titular seguro, un jugador que genera equilibrio, orden y respeto, su nombre es Stiven Vega.
David consolidado
El gran David Ospina completó su sexta titularidad consecutiva, jugando los 90 minutos y completando un récord magnífico de cinco triunfos y una sola derrota.
En esa media docena de partidos recibió cuatro goles y le permitió a su club, el Al Nassr de Arabia Saudita, encontrar la solidez defensiva que tanto necesitaba.
Para nadie es un secreto que la clase del arquero antioqueño, sumada a la tranquilidad que emana en la portería, contagian a sus compañeros y los libera para que entreguen lo mejor.
Ospina cada día se acerca más a su mejor versión, sonríe la selección.
Alinea golea
Cuatro jugadores ‘Alinea’ se despacharon con anotación durante el fin de semana. Edier Ocampo la mandó al fondo de la red en el clásico paisa, fue el uno por uno transitorio para Atlético nacional; al final fue empate a dos goles frente a Independiente Medellín.
José Fajardo marcó en el empate a dos de su club, la Universidad Católica de Ecuador, frente al Imbabura.
En Espańa, a pesar de las derrotas de Sporting de Gijón y Burgos CF, Juan Ferney Otero y Anderson Arroyo marcaron para sus clubes.